Si la beauty sponge todavía no es imprescindible en tu rutina de maquillaje, no sabes lo que te estás perdiendo. 

Uso la  beauty sponge desde hace más de 4 años y desde entonces son muchas las chicas que se han vuelto adictas a esta esponja más cómoda. Fácil de usar, de limpiar y de cuidar. Necesita poca atención y hace que maquillarse todos los días sea un placer muy sencillo.

Tengo esponjas de diferentes marcas, pero hoy os quiero hablar de la beauty sponge de la marca Belle. Ésta beauty sponge es pequeña pero matona, de color rosa, con zonas amplias y estrechas para maquillar distintas zonas del rostro. Esponja de maquillaje que no contiene látex, para evitar alergias, es suave y ligera y al mojarla bajo el grifo, dobla su tamaño.
La beauty sponge se debe usar en húmedo y la manera de aplicar la base con ella consiste en poner una pequeña cantidad de base en una paleta (o en la mano) y empapar toda la base de la esponja hasta que quede bien uniforme. Con la esponja ya cargada de producto trabajamos el rostro con pequeños toques desde el centro hacia los extremos, sin arrastrar. 

Hay que trabajar a toquecitos y así conseguimos fundir la base y que quede muy natural. El efecto es ligero, como de aerógrafo, y se puede conseguir un acabado más cubriente trabajando con una base de alta cobertura como la matificante o bien trabajando a capas una base de cobertura media,...