Siempre me ha gustado envolver regalos, creo que esto se me ha quedado desde mi epoca de estudiante, cuando mis regalos más modestos (muchos de ellos DIY) tenían que llevar también un envoltorio tan original como el interior y que le dieran un poco más de categoría. Como si quisiera que ya el papel transmitiera todo el cariño que escondía dentro, aunque fuera un sencillo detalle.
Ahora, parece que la falta de tiempo ha hecho que muchas veces no envuelva de forma tan original, pero os aseguro que sigo fijándome en ese tipo de detalles. La inspiración que os traigo hoy, no se trata de papel de regalo precioso comprado en alguna tienda, sino tomar papeles lisos más sencillos: como un kraft negro, blanco o natural y personalizarlo. ¿Te quedas" Imagen vía: Say yes
En la primera imagen papel kraft negro adornado con estrellas doradas pintadas a mano y como lazo un cordel de arpillera. En la siguiente, la idea es muy similar pero el detalle original lo conforma la corona de muérdago o similar, que le aporta color al envoltorio.
Imagen vía: Guia de manualidades
Con unas tachuelas doradas se adorna la parte superior del envoltorio blanco nieve, el cordel gris también le aporta el detalle minimalista y de color. La etiqueta del envoltorio pequeño está hecha con un retal de cuero en gris al que se le ha pegado una esquina de washi tape dorado.
Imagen vía: Homeyohmy
El detalle original de estos paquetes es la cinta que los rodea, arpillera y con u...